En un partidazo cargado de tensión, Independiente y Villa La Ñata igualaron 2-2 en Gerli y la serie quedó abierta para la revancha, donde deberá haber un ganador y será quien mantenga la categoría; si empatan habrá alargue y luego penales.
La Ola Naranja pegó primero con Ysmael Maldonado pero luego ya en la segunda parte, la expulsión de Lucas Ramirez fue un punto de quiebre para el partido. Primero Mateo Flores y luego Adrián Caruso dieron vuelta la historia pero cuando parecía que el Rojo cerraba el encuentro, un error en salida le permitió a Germán Brizuela dejar las cosas empatadas de cara a la revancha.
En el medio hubo polémicas, tres tiros de La Ñata en los palos (ver resumen), que pusieron emociones variadas a un partido en el que ninguno se guardó nada pero no pudieron salir de la igualdad. De los tresencuentros que jugaron en el año los dirigidos por Sebastián Mareco no pudo nunca ganarle a Independiente habiendo empatado dos y caído en el restante; por su parte el dato negativo de los conducidos por Damián Aliende es que aún no pudo sumar de a 3 desde la llegada de su nuevo cuerpo técnico.
Alguna de estas estadísticas se quebrará en la revancha, al menos en los festejos finales ya que a pesar de que puedan volver a empatar alguno sonreirá y otro perderá la categoría.
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