El técnico del primer equipo de Kimberley Femenino habló con A Dos Toques y contó sus sensaciones con el momento de las chicas que comparten la punta del toreno junto a Boca Juniors. Además, el ex DT de Hebraica, contó como vive su experiencia dirigiendo mujeres y la difusión de la actividad.
Vienen de ganarle a San Lorenzo y a Club de Jóvenes ¿Era el paso que les faltaba para mentalizarse que pueden cortar con la hegemonía de las santitas?
Ganar ese partido fue muy importante, desde lo anímico y lo deportivo fue fundamental. San Lorenzo es un gran equipo y el máximo campeón en la disciplina. Claramente se vio que estamos a la altura. El partido con Club de Jóvenes fue algo impresionante desde lo emotivo sobre todo, porque dimos vuelta un 0 a 3 con una entrega increíble de todas las jugadoras, desarrollando un futsal de gran nivel y sin darse por vencido en ningún momento, si queremos pelear el campeonato teníamos que ganar.
Tenés un gran plantel, con muchas jugadoras de experiencia ¿están para campeones?
El plantel con el que cuento es de un nivel deportivo y una calidad humana que no deja de sorprenderme día a día. Por supuesto que ayuda contar con jugadoras con una gran trayectoria y experiencia dentro de la disciplina. Mis jugadoras y yo estamos mentalizados, entrenando de gran manera, viviendo intensamente el día a día porque entendemos, creemos y soñamos que podemos ser campeones, aunque siempre con los pies sobre la tierra sabiendo que hay muy buenos equipos que se preparan para lo mismo.
¿De acá al final va a ser un mano a mano con Boca?
Con los resultados que se vienen dando, pareciera que sí, ya hay bastante diferencia con los escoltas, aunque el torneo no llegó a la mitad, así que habrá que esperar.
¿A qué se debe el crecimiento del equipo? ¿Como haces para manejar a un grupo de mujeres?
El equipo creció porque se entrena con gran intensidad, fuimos encontrando el sistema de juego (agresivo, con presión en toda la cancha), evolucionamos en el aspecto táctico con jugadas de pelota parada, diferentes sistemas en ataque y defensa, también mejoramos mucho en lo físico con la llegada del profe (ya que no hicimos pretemporada). Al ser mi primera experiencia al frente de un equipo de mujeres, fui aprendiendo mientras se daban las situaciones, pero tenemos una gran relación, cordial y afectuosa con las chicas. Son un excelente grupo de amigas dentro y fuera de la cancha, elegidas para llegar al club de manera magistral por Verónica Ribero, de esa forma a mí me resulta mucho más fácil y natural estar al frente de un grupo de estas características.
¿Qué balance haces de tu experiencia dirigiendo a las chicas?
Al día de hoy es muy positivo, más allá de los resultados deportivos, me encuentro muy cómodo y a gusto. Creo que puedo aportar mucho desde mi experiencia en el deporte como entrenador y docente que soy.Todavía estoy conociendo y aprendiendo como son las mujeres futbolistas, es un gran desafío para mi carrera profesional.
¿Cómo ves hoy en día la situación del futsal femenino en cuanto a su organización y difusión?
Creo que está todavía poco desarrollado y la difusión si bien se realiza, podría ser más amplia.Hoy hay muchos partidos del futsal femenino que va más gente a verlo que los partidos de varones. Las chicas de los diferentes clubes tienen muchos seguidores. Nosotros en el partido con San Lorenzo cortamos más de 200 entradas, no se cuantos partidos de varones sacando a los clubes más importantes llevan esa cantidad de gente. En cuanto a la organización, el torneo no requiere demasiado análisis, es un partido por semana y nada más, el valor agregado se lo tienen que dar los clubes generando actividades y propuestas extras. Será muy bueno que se jerarquice la competencia, que se pueda armar un torneo nacional como el del futsal masculino, que la Copa Libertadores sea competencia oficial y vayan los dos mejores equipos de cada año y que estas acciones generen más incentivo en los clubes y las jugadoras.
¿Cuáles son los objetivos de Kimberley?
El objetivo inmediato es llegar lo más alto posible en el campeonato, en Primera depende de nosotros, en Tercera ya no. A mediano y largo plazo te puedo decir que consolidarnos en la disciplina, poder contar con más jugadoras en las divisiones menores. Hoy por llevar 6 meses nada más, contamos con tres sponsor que nos apoyan en todo momento y una colaboración total desde la dirigencia del club tratando de que no nos falte nada y las chicas estén a gusto y cómodas dentro del club. Intentaremos crecer y desarrollarnos en todos los aspectos: deportivos, sociales, priorizando siempre que Kimberley es un club de barrio con gente que realiza las cosas con pasión.
¿Cuál es tu sueño como entrenador de futsal?
Hoy estoy abocado al futsal femenino, te diría que para este año sería poder ganar el campeonato. Para más adelante poder tener un equipo que pueda estar en los primeros planos por varios años y se lo respete por lo bien que juega. Siempre uno espera dejar algo en sus jugadores, una marca, una huella o alguna enseñanza. De ser así me doy por satisfecho. El futsal tampoco da para mucho más, la motivación y las ganas de mejorar y crecer, de ser mejor profesional depende de cada uno, en eso estoy seguro que no voy a fallar y no voy a fallarme.
