Hebraica sumó su sexta victoria, pasó en las posiciones al rival de turno y de los cuatro ascendidos es el que más puntos tiene por lo menos hasta que juegue Cultural los dos partidos menos que tiene con respeccto al equipo de Pilar. Por otra parte, América no puede afirmarse como candidato y sigue alternando victorias con derrotas, lo que lo mantienen en mitad de tabla.
Un vestuario trajo suerte y el otro no era el indicado en la noche de ayer. Hebraica se fue a cambiar en el mismo lugar donde lo había hecho el Ciclón, mientras que América reemplazaba a Pinocho y el final de la historia fue la misma.
Hebraica jugó el mejor partido de la temporada, ya que considerando el equipo que tenía enfrente hizó todo lo que marcaba el libreto, se defendió con uñas y dientes, golpeó en los momentos justos e impidió que América pudiera hacer su juego.
Uno a veces tiende a evaluar si un equipo juega bien o mal de acuerdo a si es vistoso o efectivo… En mi opinión, son muchas las cosas que llevan a un equipo a jugar bien o mal, y no dejar al rival hacer su juego considero que es una gran virtud, sumado a no equivocarse en que momento jugar o en que momento poner llevan a un equipo a terminar con la valla invicta y en este caso con tres goles en el marcador. Cabe destacar también que Poggi, arquero de Hebraica fue una de las figuras del partido y que los palos ayudaron al equipo de la colectividad, pero no se vio al América que nos tiene acostumbrado. Seguramente habíra sido otro el partido si Marcone o cualquiera de los hermanos Vaporaki hubiera abierto la cuenta en el primer tiempo en una de las tantas ocaciones, pero la historia se escribió así, Hebraica le ganó tres a cero a América y se afianza en su pelea por mantener la categoría.
Los de Pilar se están apoyando cada vez más en la seguridad de Poggi, la regularidad de Birenwaig y las siempre oportunas apariciones de los hermanos Edelstein, la gran entrega y calidad de Pastor y los que van entrando cada vez van agarrando mas confianza y hacen que el equipo no lo sienta tanto como si les pasaba en las primeras fechas. Por el lado de América, Constantino Vaporaki comandaba los ataques que terimnaban con remates de Potenza, Alamiro Vaporaki y Marcone pero siempre con el mismo resultado, las manos de Poggi. Cuando se iba el primer tiempo, apareció Pastor, gran jugada del menor de los Edelstein por izquierda, para que el goleador sentenciara con una magnífica definición, 1 a 0 y al descanso.
La segunda parte apareció la figura de Birenwaig, que marcó sin parar todo el partido y siempre fue salida para arrancar los avanzes de Hebraica. Poggi siguió tapando todo y Pastor con los hermanos Edelstein complicaron siempre a un América que se iba quedando sin ideas y sacaba a Quevedo como arquero jugador, pero lo único que logró fue darle mas oportunidades a Hebraica de cerrar el juego, así fue cuando el mayor de los hermanos pateó de atras de mitad de cancha para poner el 3 a 0 final.
Un párrafo aparte se merece el segundo gol de Hebraica cuando la agarró Mati Edelstein cerca de su área y frente a la marca de dos rivales a pocos metros de su arco salió jugando entre los dos con un poco de fortuna la pelota quedó en sus pies y luego de una asistencia de Pastor, el mismo Mati anotó el 2 a 0 que empezaba a definir el encuentro.
Con esta victoria Hebraica suma 19 puntos, y está por encima de América que se quedó con 18 pese a tener dos partidos pendientes.
Lucas Makarz
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